LA VIDA NO SE MIDE POR EL NÚMERO
DE VECES QUE RESPIRAMOS SINO POR
LOS LUGARES E INSTANTES QUE NOS
QUITAN LA RESPIRACIÓN.
He tenido la gran suerte y el enorme privilegio de viajar por medio mundo acompañando a maravillosas personas que junto a todos los rincones tan asombrosos como irrepetibles que he visitado, los llevo muy dentro de mí.
Pablo Neruda dijo en uno de sus poemas algo parecido a esto:“...Algún día en cualquier lugar te encontrarás a ti mismo, y ésa, sólo ésa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas.. “
Ahora, quiero compartir con vosotros, algunos de estos lugares que por las circunstancias que fuesen, felizmente... perdí la respiración.
Bodie es un pueblo abandonado del condado de Mono, California, EE.UU.
En 1859, se descubrió un filón de oro en la colina de Mono Lake y se creó el primer asentamiento minero con apenas 20 habitantes.
En poco más de diez años, la fiebre del oro en California, hizo que el pequeño pueblo de Bodie, llegara a contabilizar los 10.000 habitantes.
Junro al crecimiento desmesurado de la ciudad, también proliferó el vandalismo, los atracos y los crímenes. La población se ganó una mala reputación y fue denominada como "un mar de pecado azotado por la tempestad de la lujuria y la pasión".
En 1882, las compañías mineras se declararon en bancarrota y la población de Bodie empezó a emigrar.
Sin embargo, la ciudad siguió funcionando con los dos yacimientos que seguían en activo.
La última mina de la ciudad cerró poco después de la Segunda Guerra Mundial y la ciudad de Bodie pasó a convertirse en "la ciudad fantasma".
En 1960, Bodie fue designado un Distrito Histórico de los Estados Unidos.
En 1859, se descubrió un filón de oro en la colina de Mono Lake y se creó el primer asentamiento minero con apenas 20 habitantes.
En poco más de diez años, la fiebre del oro en California, hizo que el pequeño pueblo de Bodie, llegara a contabilizar los 10.000 habitantes.
Junro al crecimiento desmesurado de la ciudad, también proliferó el vandalismo, los atracos y los crímenes. La población se ganó una mala reputación y fue denominada como "un mar de pecado azotado por la tempestad de la lujuria y la pasión".
En 1882, las compañías mineras se declararon en bancarrota y la población de Bodie empezó a emigrar.
Sin embargo, la ciudad siguió funcionando con los dos yacimientos que seguían en activo.
La última mina de la ciudad cerró poco después de la Segunda Guerra Mundial y la ciudad de Bodie pasó a convertirse en "la ciudad fantasma".
En 1960, Bodie fue designado un Distrito Histórico de los Estados Unidos.