miércoles, 22 de febrero de 2017

LUGARES E INSTANTES... 20


LA VIDA NO SE MIDE POR EL NÚMERO

 DE VECES QUE RESPIRAMOS SINO POR

 LOS LUGARES E INSTANTES QUE NOS

 QUITAN LA RESPIRACIÓN.

He tenido la gran suerte y el enorme privilegio de viajar por medio mundo acompañando a maravillosas personas que junto a todos los rincones tan asombrosos como irrepetibles que he visitado, los llevo muy dentro de mí.
Pablo Neruda dijo en uno de sus poemas algo parecido a esto:“...Algún día en cualquier lugar te encontrarás a ti mismo, y ésa, sólo ésa, puede ser la más feliz o la más amarga de tus horas.. “
Ahora, quiero compartir con vosotros, algunos de estos lugares que por las circunstancias que fuesen, felizmente... perdí la respiración. 

EL EJÉRCITO DE TERRACOTA DEL

 EMPERADOR QIN SHI HUANG

El señor Yang Zhifa firmándome un libro en el museo de Xián (1999)
En la primavera de 1974, este campesino llamado Yang Zhifa, descubrió al perforar un pozo, en el cantón de Yanzhai cerca de la ciudad de Xián (China), varios soldados de terracota a tamaño natural. 
Las excavaciones posteriores dieron con más de siete mil figuras, caballos y carros en formación de combate. Un extraordinario ejército, puesto allí, hace más de dos mil doscientos años, para proteger los restos mortales del primer emperador chino, Qin Shi Huang.
Pues para el amigo Yang, este espectacular descubrimiento, Patrimonio Histórico Cultural Mundial de la UNESCO, le ha servido el gran honor imperial para estar sentado durante todo el puñetero día firmando ejemplares de libros de esta efemérides en la pequeña tienda del museo del mausoleo.
Como el pobre ex-campesino ya tiene sus años, (yo lo conocí en 1999) y ahora debe de estar bastante estropeado, y para no disminuir las ventas cuando se toma sus merecidos recesos y descansa de su ardua tarea de firmar libros, (que me lo digan a mi el día de Sant Jordi), las mentes ilustres del museo, lo sustituyen por otro chino que sigue garabateando la página en blanco para dedicatorias con la artística e ilegible caligrafía china.
También es cierto que Yang Zhifa, no lo conoce nadie y como casi todos los chinos se parecen, si cuela... cuela.

El emperador Qin Shi Huang de la dinastía Qin, que según cuenta la historia, su voz era como un aullido de chacal y su corazón estaba desprovisto de misericordia, unificó China y además de construirse este increíble séquito para su entierro, es el responsable de la edificación de la Gran Muralla China, con un saldo de dos millones de muertos. A pesar de todo, hoy está considerado como un colosal fundador de la historia de China.
El cabroncete del emperador, poco después de tomar el poder, reclutó a 700.000 esclavos para construir su caprichoso mausoleo.
Este fantasmagórico sepulcro consta de una pirámide de 76 metros de altura rodeada de murallas y sofisticados sistemas de alarma. En su interior y además de un tesoro incalculable enterraron vivas, a sus concubinas, a los ingenieros que idearon los artilugios de seguridad y algún que otro pardillo para hacerle compañía. 
El mausoleo del emperador Qin Shi Huang fue descubierto después del ejército de terracota pero las autoridades chinas son reacias a entrar en la pirámide y no correr riesgos.
Allí está para descubrirlo y abrir otro capítulo de la historia.

Si tenéis oportunidad de viajar a Pekín, no dejéis de visitar Xián, que se encuentra a una hora en avión de la capital de China, o si sois adictos al trekking, ruming, footing, jogging... o cualquier otro sistema de maltrataros físicamente, podéis emprender la mítica Ruta de la Seda:
Saliendo a la derecha os encontraréis Italia, luego Turquía, Siria, Irak, Pakistán, Uzbekistán, Tayikistán, Mongolia y finalmente Chang'an, la actual Xián que hace más de 2.000 años, fue la mayor metrópolis  del mundo y durante 11 años capital del Imperio Chino.

jueves, 16 de febrero de 2017

SIN MÚSICA LA VIDA SERÍA UN ERROR Friedrick Nietzsche 8

LA INSISTENTE PRESERVACIÓN DE LA MÚSICA JAZZ

Fotos archivo

En la planta baja de este destartalado edificio que exhala y cruje la vieja madera, ubicado en el 726 de South Peter Street (Barrio Francés) de New Orleans, se encuentra el famoso Preservation Hall Jazz Band, el local en el que se puede escuchar el mejor jazz de la ciudad y me atrevería a decir de todo el estado de Luisiana y del sur de los Estados Unidos de América.
Si tenéis la paciencia y el tiempo para aguantar estoicamente las largas e interminables colas que se forman frente la entrada (no admiten reservas) y lográis entrar en el pequeño, cutre, caluroso y auténtico local musical, tendréis a los veteranos músicos, en mangas de camisa, a pocos metros de distancia y escucharéis, el mejor jazz que jamás hayáis oído.
Además y simbólicamente, con el precio de la entrada, habréis contribuido a "proteger, preservar y perpetuar las tradiciones musicales y el patrimonio de Nueva Orleans" según consta en los estatutos de la "Fundación Preservation Hall" .
Por cierto, luego para celebrarlo, os tomáis una cerveza o un "bourbon" en "Bourbon Street, justo a la esquina. La calle más pervertida que jamás hayáis pisado. 


miércoles, 8 de febrero de 2017

MIS PAPILAS GUSTATIVAS 5

UN PLACER GASTRONÓMICO 

EN EL DELTA DEL MEKONG

El río de los Nueve Dragones, conocido en occidente como el Mekong, es uno de los ríos más caudalosos del mundo.
Nace en las montañas del Tibet y cruza China, Myanmar, Laos, el norte de Thailandia y Vietnam para verter sus aguas en el mar de la China Meridional.

Con esta barca navegué por el Delta del Mekong... 
Sí, ya se que no es el auténtico junco que usan los vietnamitas que habitan y trabajan en la ribera del río, pero es lo que amablemente me ofrecieron para resistir, estoicamente y sin desfallecer, las dos horas largas bajo el calor agobiante y una humedad sofocante que perduró el "crucero" por el río. 

El recorrido por el Delta del Mekong, desde el embarcadero de Cai Be, en donde se concentra a primerísima hora, el popular mercado flotante, hasta el sendero, en medio de una vegetación exuberante, en el que inexplicablemente, se ubicaba el restaurante Le Longanier, todo es insólito... sorprendente. Todo es legendario.
El bullicio del mercado flotante, una algarabía de gritos y rugidos de enormes motores que levantaban la proa de las pequeñas barcas de madera repletas de frutas,hortalizas, cajas de bebidas, ropas o enseres domésticos, contrarresta con la tranquilidad y el silencio de los estrechos canales de río que en sus riberas, los residentes de las destartaladas cabañas, tejen a mano cualquier tela o fabrican, con hojas de palmera, los techos de sus casas o elaboran dulces y caramelos.
En el Delta del Mekong, se vive y se trabaja en las orillas de sus aguas de color tierra, una vida humilde, sencilla y sin rencores.
 Aunque la apariencia de este pescado sea horrible y el nombre, "pez oreja de elefante", tampoco sea nada atractivo, en realidad otorgué a mis papilas gustativas un delicioso placer.
También es cierto que el lugar, el ambiente, la amabilidad y la simpatía de las vietnamitas que me rodeaban, influyeron a que este pequeño monstruo asado de piel crujiente, de las turbias aguas del Mekong, presentado verticalmente y desmenuzado con una habilidad asombrosa, utilizando los típicos palillos, tuviera una agradable textura. 

miércoles, 1 de febrero de 2017

A TRAVÉS DE LA CORTINILLA 22

Marrakech, “La perla del sur” es hoy una gran ciudad amurallada con exuberantes jardines y magníficos palacios y mezquitas.                            
Los promotores que dieron notoriedad a esta bella ciudad de Marruecos, fueron en su inicio, los millonarios de los años veinte y treinta y los artistas e intelectuales extravagantes con sus fiestas psicodélicas en los años sesenta y setenta.                                                                                                                
Nació en aquellos años el mito de Marrakech erótico y bohemio y las generaciones posteriores desembarcaron en la ciudad y algunos decidieron trasladarse a vivir a La Medina, la parte antigua de la ciudad, recuperando antiguos edificios en plena decadencia.
Marrakech es una ciudad favorecida por la belleza de sus palacios y edificios combinando su característico estilo islámico con contrastados colores.         
La gran belleza que se encuentra en el interior de muchos edificios ubicados en La Medina, es indescriptible. Los patios y extensos jardines así como el uso de la caligrafía islámica refleja el puro estilo de la arquitectura de Marruecos.

En las afueras de la ciudad se encuentran los Jardines de La Menara. Un conjunto de jardines, seductoras palmeras, huertos, campos de olivos y un enorme estanque, todo ello construido en el siglo XVI que ya utilizaban un sofisticado sistema de canales subterráneos. La dársena recibía el agua gracias aun antiguo sistema hidráulico y la transportaba desde las montañas a 30 kilómetros de distancia. 

En este idílico lugar, un sultán muy apasionado y aficionado a organizar citas amorosas, construyó en el siglo XIX una “minzah”, o pabellón o en este caso, un ”prostíbulo”, para disfrutar de los placeres de sus concubinas. 
Las malas lenguas, dicen que en el Pabellón de La Menara, que recibe el nombre de la pirámide verde que corona el edificio, el cabroncete sultán, al amanecer y después de una noche desenfrenada, lanzaba al estanque a una de las amantes que durante toda la noche la había seducido airadamente
Como baño matutino en un lago sublime no estaba mal, siempre y cuando, la pobre y desdichada concubina, supiera nadar…